El Museo de Bellas Artes de Asturias se suma a las celebraciones por la conmemoración del Centenario Sorolla este 2023 y expone, por primera vez
en su historia, el importante conjunto de obras del pintor que conserva la Institución.

Comisariada por Gabino Busto Hevia, la exposición reúne catorce interesantes obras que permitirán al visitante acercarse al Sorolla más grandilocuente, con obras como Corriendo por la playa. Valencia, así como al más intimista y familiar a partir de un grupo de apuntes de gran delicadeza y cuidado. A este respecto, el conjunto de obras que conforman Pinceles llenos de sol, se encuentran adscritas a la etapa central de la carrera del pintor, con dataciones a caballo entre finales del siglo XIX y principios del XX; momento en el que se produjo la consolidación de Sorolla
como artista de éxito nacional e internacional y que, a partir de 1900, dio paso al periodo en el que alcanzó su madurez profesional con la plenitud de su estilo.

Trece de estas piezas, entre las que figuran obras maestras como Preparación de la pasa (Transportando la uva. Jávea) o la ya citada Corriendo por la playa. Valencia, proceden de la colección que el empresario y financiero asturiano Pedro Masaveu reunió en la década de 1970 y que, tras su fallecimiento, formaron parte del lote que la Administración del Principado de Asturias recibió como dación en pago de los derechos de impuestos sucesorios. Obras que, una vez saldada la deuda, el Gobierno del Principado de Asturias adscribió al Museo de Bellas Artes de Asturias, en 1994.

Tres años más tarde de producirse esa adscripción, se incorporó una nueva pintura de Joaquín Sorolla a la colección regional en calidad de depósito: El xatu o El xatín, otro extraordinario cuadro del pintor levantino que, en esta ocasión, procede de la colección de Juan Antonio Pérez Simón.

Sin embargo, esta muestra cuenta con otras novedades y atractivos. En primer lugar, gracias al apoyo de la Asociación de Amigos del Museo, la obra Niños corriendo por la playa. Valencia, cuenta con un nuevo marco. Se trata de una réplica de la enmarcación original que, en su día, el propio Sorolla diseñó y que incluye elementos de orden jónico altamente interesantes. Esta recuperación, que ha sido posible gracias al patrocinio de la citada asociación, devuelve a la obra su unidad original, aportando un nuevo atractivo a la que, sin duda, es una de las grandes creaciones del pintor valenciano.